La fotografía es, por naturaleza, imagen estática. Desde el origen, la captura del movimiento ha sido una obsesión fotográfica para superar ese carácter de «tiempo encapsulado» de las fotografías.
En este artículo te contamos diferentes técnicas para capturar el movimiento en tus fotografías y te mostramos algunos autores que han hecho un uso interesante de esta técnica. Si deseas aprender más técnicas como estas echa un ojo a nuestros cursos de fotografía.
El movimiento en la fotografía desde sus orígenes
Nadie puede negar que «fotografía» y «tiempo» están íntimamente relacionados: no puede existir una fotografía sin un tiempo de exposición, un período en el que el obturador permanece abierto.
Desde el origen de la fotografía en 1826 la captura del movimiento ha sido una obsesión entre los fotógrafos, tanto técnica como estéticamente. Las primeras técnicas fotográficas, como puede ser el daguerrotipo, eran tan poco sensibles que requerían tiempos de exposición larguísimos (de varios minutos), haciendo imposible el registro del movimiento. Por eso, en estas primeras fotografías siempre se retrata a sujetos cómodamente sentados, que pudieran mantener la posición durante minutos, o paisajes donde el tiempo no era un inconveniente.
Fue necesario un cierto desarrollo técnico, tanto en la cámara como de las emulsiones fotográficas, para que pudiera capturarse el movimiento en las fotografías de una forma cómoda. Uno de los inventos clave que facilitó la posibilidad de congelar el movimiento fue el desarrollo de la película fotográfica por parte de George Eastman, fundador de Kodak.
Otro invento clave que ayudó en este desarrollo técnico de la fotografía fue la aparición de las cámaras Leica, pequeñas, compactas, ligeras, con un visor que te permitía ponerte la cámara a la altura de los ojos sin variar el punto de vista, fue clave para terminar de definir la estética fotográfica del movimiento.
Cómo transmitir movimiento en las fotografías
En una fotografía queda implícito un punto espacio-temporal concreto. Pero ese instante se puede manipular para «estirarlo» o «congelarlo» con el fin de transmitir movimiento o linealidad temporal. ¿Quieres saber cómo? Te contamos algunos trucos.
Velocidad de obturación baja
Quizás la forma más obvia de capturar el movimiento en una fotografía sea el uso de velocidades de obturación bajas con las que se consiguen imágenes trepidadas cuando el sujeto se mueve más rápido que la mencionada velocidad del obturador. Uno de los ejemplos más brillantes es, sin lugar a dudas, el fotográfo y artista plástico Ernst Hass quien, a parte de ser uno de los pioneros del uso del color, utilizó la trepidación como parte de sus energéticas composiciones, haciendo de ello una estética y discurso propios.
Estaremos hablando, posiblemente, de tiempos de exposición que están por debajo de 1/10s y, en el caso de Ernst Hass, los hacía sin trípode, acompañando en muchos casos el movimiento de la cámara con el movimiento del objeto fotografiado.
Velocidad de obturación alta
Sin embargo, también se puede transmitir movimiento con obturaciones altas. Unos de los ejemplos mas relevantes es el del fotógrafo francés Jacques Henri Lartigue. El movimiento implícito, el gesto inesperado y el dinamismo son sus señas de identidad. Lartigue lo conseguía utilizando obturaciones altas.
En la fotografía de Martin Munkácsi también es notable el uso del gesto para denotar movimiento. Un fotógrafo de moda y editorial excepcional que desde aquí os recomendamos.
Richard Avedon, influenciado tanto por Lartigue como por Munkácsi, también introdujo estas técnicas en su fotografía, especialmente a través del gesto, generando grandes iconos de la fotografía de moda donde el movimiento era la base de su creación.
Incluso podemos ver cómo el famoso Henri Cartier-Bresson lo utiliza para denotrar movimiento y dinamismo en la calle, viéndolo especialmente en su famosísima fotografía del hombre saltando el charco.
El movimiento a través de cronofotografías
Hay fotográfos que, con un enfoque más científico, también abordaron el tema del movimiento. El investigador Eadweard Muybridge, con su serie de cronofotografías (varias imágenes capturadas sucesivamente e impresas a la vez) sentó las bases para la invención del cinematógrafo. Otro fotógrafo que destacó por sus estudios sobre el movimiento fue Étienne Jules Marey, autor de imágenes muy poéticas donde el movimiento era el elemento central de su trabajo.
El movimiento y el tiempo en la fotografía contemporánea
El tiempo y el movimiento en la fotografía no solo es objeto de reflexión en la fotografía clásica, sino que se sigue extendiendo a la fotografía contemporánea. Son conceptos que nos siguen intrigando como sociedad.
En un ámbito más contemporáneo podemos citar a Hiroshi Sugimoto y su serie sobre cines. El fotógráfo japonés deja el obturador abierto durante toda la proyección de la película, implicando un movimiento que parece ausente en sus fantasmagóricas imágenes, denotando el paso del tiempo en sus fotografías.
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